El 5 de noviembre, según informó Fortune, el FBI recuperó con éxito los 8.3 millones de dólares desviados por el ex CEO de un banco de Kansas. Estos fondos estaban depositados en una cuenta de criptomonedas en las Islas Caimán. Ayer, en un tribunal federal de Kansas, 30 accionistas de bancos comunitarios escucharon que recuperarían totalmente su inversión y estallaron en sollozos de alivio. En agosto de este año, el ex CEO del banco Heartland Tri-State de Kansas, Shan Hanes, fue condenado a 24 años de prisión por desviar 47 millones de dólares de los clientes y transferirlos a una cuenta de criptomonedas operada por estafadores. El fiscal dijo que Hanes también robó fondos de una iglesia, un club de inversiones y el fondo universitario de su hija, perdiendo 1.1 millones de dólares en este lavado de ojos personal. El banco de Hanes fue cerrado y vendido por agencias federales de regulación debido a la falta de fondos. Los 47.1 millones de dólares depositados por los clientes fueron asegurados y reembolsados por la FDIC. Sin embargo, se creía que los 8.3 millones de dólares invertidos por los 30 accionistas de bancos comunitarios se habían perdido. El fiscal dijo que Hanes cayó en una estafa conocida como '杀猪盘' y transfirió los 47.1 millones de dólares de los clientes en 8 semanas a través de 11 transferencias telegráficas desde finales de 2022 hasta el verano de 2023.
El FBI recuperó 8,3 millones de dólares en fondos relacionados con el caso de una cuenta de encriptación en las Islas Caimán.
El 5 de noviembre, según informó Fortune, el FBI recuperó con éxito los 8.3 millones de dólares desviados por el ex CEO de un banco de Kansas. Estos fondos estaban depositados en una cuenta de criptomonedas en las Islas Caimán. Ayer, en un tribunal federal de Kansas, 30 accionistas de bancos comunitarios escucharon que recuperarían totalmente su inversión y estallaron en sollozos de alivio. En agosto de este año, el ex CEO del banco Heartland Tri-State de Kansas, Shan Hanes, fue condenado a 24 años de prisión por desviar 47 millones de dólares de los clientes y transferirlos a una cuenta de criptomonedas operada por estafadores. El fiscal dijo que Hanes también robó fondos de una iglesia, un club de inversiones y el fondo universitario de su hija, perdiendo 1.1 millones de dólares en este lavado de ojos personal. El banco de Hanes fue cerrado y vendido por agencias federales de regulación debido a la falta de fondos. Los 47.1 millones de dólares depositados por los clientes fueron asegurados y reembolsados por la FDIC. Sin embargo, se creía que los 8.3 millones de dólares invertidos por los 30 accionistas de bancos comunitarios se habían perdido. El fiscal dijo que Hanes cayó en una estafa conocida como '杀猪盘' y transfirió los 47.1 millones de dólares de los clientes en 8 semanas a través de 11 transferencias telegráficas desde finales de 2022 hasta el verano de 2023.